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Melanie Anabella

Contador de curiosos

domingo, 25 de agosto de 2019

Mi marciana

Hubieron en mis días conmigo misma y bastante encierro, algunas canciones que tocaron los rinconcitos olvidados de mi ser
Hoy trajeron a mi presente, sin querer recuerdos de cuando era una chica enamorada del amor y sentí ternura por ella.
La gente que me cruza hoy tiene a veces una imagen totalmente errada de quien soy, eso noté últimamente. El que me cruza hoy cree que soy un ser frío, con temor a entregarse y al amor sobre todo.
Pero eso es mentira.
Si pueden ver en mis ojos, todavía se aprecia bien claro un brillo que traje al nacer, yo misma lo veo cada día en el espejo y lo siento sin mirarlo también, está ahí para recordarme mi profundidad. 
 Es a esto lo que le doy tanto valor.

Creo que el amor es lo más cerca que podemos estar del paraíso y también sé que muy pocos afortunados encuentran esa paz en el pecho al mirar los ojos del otro. Es un regalo sin igual.
Debería ser valorado por encima de todo lo que conocemos, el compartirse por el placer de hacerlo honestamente y desde lo más  puro del sentimiento, solo por compartir.
Tuve también la intención sincera de conocer el mundo del otro, de adentrarme en su luz, tanto como en su oscuridad. Pero no todos estamos dispuestos a abrir ese cofre, yo tampoco lo estaba para hacerlo en conjunto.
El tiempo que me di para mi sola fue y sigue siendo la etapa más llena de aprendizaje y misterio que jamás viví, el cambio de mi interior se hace tan evidente, tan grande que hasta me da  miedo, me da miedo soltarme. Soltarme entera. Y tambien tengo mis motivos.

No vivo mi vida culpando terceros, porque aprendí un truco con la vida que me resultó fascinante, nada que no tenga mi atención puede crecer o realmente existir. Lo aprendí caminando por la calle, esto lo vuelve incluso mágico porque no quedó en palabras, ni me lo contaron.
Y acá, realmente cada cosa que escribí fue real. Es la forma en la que lo vivo y lo expreso de la manera más entendible posible, sobre todo para mi, porque es lo que me libera internamente
.
Cada tanto aparece un fulano a querer convencerme de alguna historia poco inteligente, donde todo lo que espero manifestar se desvanece con cada palabra que dice y por eso vuelvo a mi interior, porque me parece más productivo e interesante. No busco, ni espero absolutamente nada, solo sé que ni yo misma puedo calcular cuan valiosa soy, lo mucho que mi cuerpo me importa, porque es mi templo, el vehículo que va a llevarme al destino de mi alma.
Entonces por qué se lo daría a quien no ve esa fuerza en mí/ o el hecho de que la sociedad no se vea de esa forma debería hacerla a una minimizarse ante la falta de estíma para que mengano no me llame “creida”, como si hubiera estado un día en mi piel, la que cuido con tanto amor, como me digo siempre.
Estoy convencida de que esta es MI forma de vivirlo y no intento convencer a nadie, aunque algunas personas cuando ven que realmente me lo tomo en serio, se alejan.
En fin, termina siendo un alivio para mí, es una carga menos, me gusta ocuparme de mis asuntos con toda la atención posible, tengo sueños mágicos, altisimos que me esperan, en todos ellos tengo que irme... También me llama mucho la atención el dolor de ego que genera el espejo que te marca algo puntual. Y si, vuelvo a lo que dije las últimas veces que escribí, que ya ni sé cuando fue la última vez, se pegan media vuelta y se van por donde vinieron.
Entonces como puede una mujer tan analítica volver a esa ilusión? No hay forma.
Es ese el temor que nombro a veces en broma pero muy honesto.
El temor que genera pararse frente a una mujer que se toma su mundo interno con toda la seguridad posible y lo lleva a niveles impensados, porque sabe bien que las consecuencias de sus actos hablan más fuerte, como deberían las acciones de quien dice adorarla, el querer ser siempre mejor me llevó a aprender que todo me es licito y no todo me conviene, sé lo que me hace bien y cuando se siente extraño, no dudo de mi intuición.
“Siempre digna e íntegra”

No tengo miedo a nada, no tengo miedo a la soledad porque la disfruto con todo el corazón, la vivo y la festejo, no tengo miedo a morir pero sí quisiera tener la salud suficiente para vivir todo lo que está escrito para mí.
No le tengo miedo al amor. Algún día mi vibración va a alcanzar un nivel tan alto que no voy a tener ninguna duda de que atraje lo mejor, pero ese dia no es hoy.

Tuve la mejor de las voluntades (digo esto riéndome) pero no salió bien y terminé cada vez sola en algún bar con mis amigas riéndome de mi propia desgracia, no tengo ganas.
Realmente me vi en situaciones que no merecía y así aprendí que realmente el asunto de mi energía tenía que tomármelo con toda la confianza del mundo mismo sabiendo que algunos iban a llamarme  egocéntrica, o lo que sea. Cuidar mi energía es mi proridad.

Ya nadie está para un poco de atención, para un poco de interés, para un poco de esto y de aquello.  Hay cosas que aprender y entender, hay otras que son urgentes, eso siento y eso tiene mi foco.
Haber tenido siempre una buena intención me deja dormir tranquila todas las noches de mi vida, porque uno puede hacer cosas pensando que son buenas para agradar, para que se vea bonito o que alguien lo aplauda pero cuando se hacen las cosas desde la pureza en la intención es especial... Ahí realmente vale, eso es lo que genera la energía del dar y recibir. Nunca lo forzado.

Soy una chica que nació ya alerta. Escuchando hasta la aguja al caer y siempre atenta a mi entorno, las personas observadoras no necesitan ninguna explicación.
Leen los gestos, las miradas, el tono en las palabras,  micro expresiones.
Aprender a hacer esto sin juzgar es otro nivel. Ahí voy llegando.
 Entonces no puedo soportar cuando sé que detrás de eso no se escondé inocente la pura intención. Me altera.
Necesité explicaciones hasta cierto momento pero aprendí tanto. Saber que mi intención es leal me enamora más de mí y menos del resto.
Lo siento mucho si me ves así o asá por decir que mi cuerpo y mi salud mental son el centro de mi vida pero es una realidad que tal vez no estés listo para aceptar.
Tal vez realmente ese temor que me llama tanto la atención del otro sea el hecho de no poder mirar dentro lo poco que están dejando en mi vida  y al no poder aceptarlo, se van después de unas cuantas promesas falsas y canciones vacías.
Antes, esto era lo que me dolía tanto, escribí demasiado sobre ese tema porque me generaba angustia “no entender cómo se van sin mirar atrás” y tuve que pasar por meses de introspección para descubrirlo y liberarlo.
Entro a la vida del otro para dejarle lo mejor de mí, porque solo eso comparto, cuando siento que no puedo compartir, porque mi energía del día no lo permite, cancelo planes y me quedo conmigo tratando de entender lo que me pasa, busco los consejos de quienes me aman pero me mantengo en mi mundo a la espera del CLICK. 
Entro a la vida del otro también porque quiero aprender aceleradamente algo que sola me hubiera tomado más tiempo. Amo aprender.
Amo MIS formas de aprender porque son solo como a MI podrían dejarme marcada la lección y solo dejo entrar a mi vida personas que entiendan esto, respetándolo como yo respeto las formas de aprender en ellos.
Claro que sería mi amiga, de hecho lo soy. Soy mi mejor amiga, a veces mi madre, a veces me da por sanarme y ser mi doctora, mi musa, mi marciana. La que habla, la que escucha, la que observa.
Todas mis versiones me trajeron a quien soy y me están llevando a quien seré... Ella me espera con los brazos abiertos, sonriendo de orgullo como yo sonrío por quien fui.
Por la fuerza y por nunca entregarme, porque mi mundo nadie lo corrompió, porque mis sueños no cambiaron ni un solo día de mi vida, solo evolucionaron y crecieron conmigo, desde que aprendí a caminar, hasta hoy.
La mujer que voy a ser me mira con orgullo como yo miro a la adolescente  que fui un día, cuando renuncié a todo lo que no me hacía YO misma, lo que no me llenaba para hacer lo que amaba y amo, más tarde lo llamé por su nombre... mi destino. Algo que todavía aprendo a dar forma.
La mujer que soy mira con orgullo la nena que podía con todo sola y así será por el resto de mi vida.
Eso es lo que se ve en mis ojos.
Ese es el brillo que me enamora en el espejo y el que nunca entendí como no supieron cuidar.
El brillo que me hace única, mi autenticidad.
Pero saber cuidarlo yo solita, con tanto amor, me da una certeza profunda…
 Todo lo realmente hermoso, se comparte.
Al amor no le tengo miedo.

(Le tengo miedo a las palomas)

jueves, 30 de mayo de 2019

Conseguí al fin estar sumergida totalmente en mi cambio de piel, pasé por varias etapas marcantes y porque amo el camino que me hace, miro atrás con el corazón.
Había una energía que no se movía para atrás ni adelante.
De flotar a hundirme.
Y de hundirme a flotar.
Una lección atrás de otra, en algun momento el descanso tiene que llegar.
Ahora estoy nadando.
Aprendí a fluir a mi manera, aprendí a mi manera, a integrar el mesaje que me llega, aprendí mi manera, mi manera única, la que está al fondo de cada laberinto mental, hasta que un día llega a salvarte. Tu propia manera.
Siento un amor genuino por la chica que lloraba al no controlar su ansiedad, cuando no sabía educar sus emociones y lloraba, un amor sincero por ella, tan desbordada de energía mal canalizada, desperdiciada.
Siento por quien fui, por la version más ingenua de mí, la que sigo siendo en el fondo cuando me equivoco, un amor tan grande que me parte el pecho de la forma más placentera.

sábado, 2 de febrero de 2019

Dona de mim


Más de una vez me senté frente al escritorio con la esperanza de poder convertir la tristeza en una herramienta que sirva, se transforme en luz al final del camino para quien no encuentra salida de las cosas que a mi también me arrodillaron de dolor.
Incluso hace días atrás después de meditar y centrarme en mi, pensé que iba a serme más fácil soltar lo que guardo después de todo lo que pasé, para así llegar a sentirme más entera... y no pude.
Una nueva noche feliz de estar acompañada con mi soledad, haciendo limpieza necesaria en los rincones de mi mente, suelto mi creatividad letra por letra.

Solo expongo la profundidad de mis emociones más sinceras cuando veo sanar esa parte que sangraba en mi interior, avanzando en su proceso; Hoy no sé si la cicatriz deja de dolerme pero acá estoy, necesitando de nuevo mi espacio, abriendo ese lugar de mí que a veces pasa un tiempo en silencio y sólo observa lo que ocurre alrededor, porque no puede sentirse fuerte, ni darme la seguridad de que ya pasó, que estoy en la zona segura, más tranquila y a salvo.
Me di cuenta que cada vez expongo menos lo que escribo, porque parezco olvidar esta plataforma...
 pero yo nunca paro de escribir, las palabras colapsan en mi cabeza,
llevo mucho tiempo guardando para mi lo aprendido y necesita salir. Necesita salir ahora.

Hablé miles de veces del amor propio y sin querer, hasta me adelanté muchos capítulos de mi propia historia, creí saber mas de lo que en realidad sabía y llegue hasta acá, al punto de realmente entregarle mi arma y escudo al universo, porque me di cuenta que no estaba controlando nada, nada, nada. NADA.
Nada estaba bajo mi control, yo solo era el títere de mi propia inconsciencia, manejada por mi mentira de creer que podía con todo, que sabía el final y creyendo que ese despertar espiritual, que un día el amor me regaló, iba a hacerlo todo mucho mas fácil, menos doloroso.
Y no.

Fue un "click" tan fuerte el primero, que hasta recuerdo cuando lo sentí, como estar con dos oídos tapados y respirar profundamente, fue como verse cansado de andar, recostarse en una cama lo suficiente cómoda y despertar 10 horas después, con los ojos brillando de tanta fuerza renovada.
Estaba necesitando ese bendito "click", uno nuevo pero más fuerte, uno que me mueva los esquemas de una maldita vez.
Lo buscaba al limite del desespero, se había ido hace tiempo pero tiempo después, de un momento a otro, me encontré hablando con esa voz, la frené de nuevo a mi manera, entonces le pedí paciencia y me enfrenté con mi sombra... Tengo que admitir, esa parte es solo para valientes.

Así he sido lo que juré no ser jamás, caminé con tristeza el camino que se me marcaba pero siempre con la mirada bien firme, como quien sabe lo que hace y sus motivos, me miré en el espejo muchas veces, entonces me pregunté con el pecho apretado si realmente era eso lo que me había prometido cuando salí por la puerta y recorrí kilómetros de experiencia, los que te llevan a nunca más ser quien eras, ya no te dejan nunca más volver, lloré con esa presión mental que te desarma por dentro y abracé mi oscuridad con toda mi fuerza.
Pero esta vez no fue para nadie.
Porque no tengo nada que probar, no tengo nada que explicar y eso me hace libre, mucho mas de lo libre que me autoproclamaba, no me toca compartir la energía que creo para mi si no estoy lista, no lucho contra las situaciones que intentan enseñarme porque cuando me resisto me veo estancada en la tierra,
Pretendo entender las cosas que hay que entender para ayer y las que quedan lejos de mi nivel de entendimiento, pasan de largo y se repiten en su espiral, con mas fuerza, depende de mi cortar el ciclo.

Ya viví lo absurdo, lo increíble, lo impensado, lo ilógico, con gran desespero, con calma sobrenatural, pasé del miedo al dolor, me llevé al límite, temí por mi vida, me esforcé tanto y con tanta garra.
Siempre fue para reencontrarme con las partes que olvidé de mí cuando bajé a este cuerpo, a este tan lindo y mio. Queriendo o sin querer.
Aún con la mejor de las intenciones para conmigo, para quienes amo, para quienes van y vienen en mi historia, aún sin tener ni un poco de maldad en las venas, todo me llevaba al comienzo continuamente, todo me lastimaba y me marcaba de alguna forma, en ese espiral que nombré.
Yo esperaba que el camino fuese un poco mas recto, creía que la buena racha iba a mantenerse mas tiempo a mi favor y que así iba a ser fácil tomar con las manos todo lo que me prometí alcanzar pero, mi vida, nunca terminamos de conocernos.

Por momentos me siento tan vulnerable, como si no fuera la hora de compartirme mucho más pero puedo hacerlo a modo de balance, de agradecimiento, de brújula para otro, para mí cuando esté pisando una nueva tierra, para recordarme que fui muy fuerte, que me las arreglo muy bien solita, que sempre dou o meu jeitinho,
Por eso estoy acá.

El final de esa historia de amor, que al dia de hoy me desestabiliza en muchos sentidos de solo pensar, fue simplemente el comienzo de un camino que no tiene final,  una prueba que pasé para hoy estar acá sabiéndome mujer entera, reconociendo dentro mio tanta luz estallando en mil tonos, no puede contenerse más.
No vuelvo a leer lo que publico, o tal vez alguna que otra frase... Pero siempre termino riendo de mi "yo del pasado", con un poco de ternura hacia quien era, hasta a veces pienso "como pude olvidarme esto?"
Yo SOY eso que leo, eso que escribí un día con tanta seguridad, soy todavía ella, la que escribe con firmeza lo que le desborda el alma.

Me pregunto cuántas veces el corazón de una mujer tiene que romperse y armarse de nuevo... cuantas más?
Por mucho tiempo me dolió no haber sido elegida por nadie nunca, aquel que tomó el título de amor eterno y el que estaba de paso, ellos nunca miraron atrás.
No haber sido extrañada, sentir que me dejaban ir... bien lejos, junto con los recuerdos, como con todo lo que no pudo ser, me dolió sentirme poco suficiente para el otro, incluso viendo todas mis cualidades únicas, mis talentos y mi profundidad llena de colores, de sabor, de MÌ, llena de vida como era y soy, como siempre voy a ser porque hay almas que no se venden, hay almas que no se doblegan, hay almas que no se cansan de buscar y buscar en el rincón menos pensado de su parte humana para mutar y liberar la autenticidad mas pura que se haya visto.
Me dolió y admito que a veces me deja pensando, me deja esperando. Si, me gusto y me amo de una forma especial, real hasta la médula.
Pasé por una etapa completamente espiritual y la vida me bajó de un ondazo al mundo que me rodea, no permitió que perdiera mi esencia pero me abrió los ojos a una versión que hoy puede manejarse sin miedo por cualquier camino que aparezca enfrente.
La vida me dió una mirada que habla incluso conmigo en mi reflejo, la mirada de quien no tiene miedo de mostrar las heridas que la autentizan cada vez mas,
En el espejo veo una mujer que se anima a pasar la barrera, por sus grandes ovarios, porque le sale de las entrañas, porque se le canta dar el paso y otro, otro más.
Y en realidad sigo siendo la misma chiquita que disfrutaba leer el diccionario, que bailaba sola hasta en la hora del almuerzo, la que cuestionaba todo lo que le imponían.
Esa chiquita da pasos de mujer.
Aunque salga mal, aunque hablen de más, así digan que NO, así se cierren las mil putas puertas.
Dar el paso de sacarse de encima los prejuicios absurdos que pesan como una mochila en la espalda, inútiles y sin sentido como son... llega a ser tan pesado cargarlo que te estanca en la peor parte de tu persona.
Continuamente desaprender lo que aprendiste mal, lo que no te explicaron bien o no quisiste escuchar.
Supe llevarme más allá y cuando no dió para más supe traerme "más acá", mantenerme en la meta sin dudar que cada situacion me llevaba a una nueva parte de mi, más madura, más fuerte, más melanie.

Yo no sé quien es dios, no sé cuantas ellas son, no sé si viven dentro de mí o merodean a mi alrededor, no sé si me cuidan de más o me cuidan de mí, cada tanto ni sé quien soy yo.
pero con seguridad puedo afirmar que me dicen al oído y al corazón lo que yo misma repito para mí misma con total confianza cuando algo no sale como esperaba,
que sea lo que quiera ser, que me vista como me quiera vestir,
y si no quiero no me visto, no pasa nada, esta es mi piel, este mi templo, esta es mi casa. Mi cuerpo.
y que camine como quiera caminar, así, moviendo las caderas como quien no está NI ahí para los que murmuran
 y me sienta como lo que soy.
que no me quede solo con lo que traje...
que salga y lo busque, lo reclame, lo atraiga mucho, mucho más.

somos la generación de las ansiedades, de las depresiones, los acelerados y algunos los que todavía piensan en modo automático, mismo sabiendo donde está el botón.
Algunos somos los que nos esforzamos por sentir los colores al verlos, por limpiar los rincones para no pintar sobre las marcas, sobre las manchas.
Yo era una adolescente un día, que se sentaba a escribir en su escritorio y hoy soy una mujer que escribiendo, para otros pero sobre todo para ella misma, se reconecta con todo lo que da sentido, en el momento que le hace falta, cuando puede verse firme, cuando se siente mas fuerte para brillar de nuevo.

supongo que realmente el 2018 nos volvió más realistas, a alguunos más humanos, nos volvió más de mundo, yo buscaba eso, quería eso con todas las ganas, no sabia como encontrarlo, solo sabìa donde quería vivir y lo hice, así cada situación me sacó las capas una por una, hasta hoy.
y continúa.
va a continuar.
La vida me va marcando donde ir y yo no pregunto por qué, yo me mando sin miedo porque al final saco conclusiones que no escucho en nadie más, porque al final las moralejas de cada una de mis historias son tan grandes y valiosas que me asombro de mí, del mundo, de lo que doy, lo que guardo dentro.

Uno de mis ex, de mis grandes lecciones (esos dolores de cabeza innecesarios), dijo que algun dia yo iba a ser una mujer increible pero que el no iba a tener el honor de vivirlo.
En ese momento lo mire sin saber que responder, me senti soñando ser esa mujer por mucho tiempo, ser ella algun dia.
"Ahora sos un proyecto de mujer." Marqué en mi corazón.
como si no valiera lo suficiente en ese entonces, esa puta sensación me caló hasta los huesos y la arrastré casi con gusto, conmigo, hasta quién sabe cuando.

Otro amor bien más profundo, admitió sentir miedo de "estarse perdiendo algo mejor" por estar al lado mío.
Aún recuerdo el dolor que me dejaron esas palabras.
Si dijera que hoy no duelen, estaría mintiendo. Al menos no tanto.
No voy a mentir, nunca lo hice, es muy facil conocerme, me gustan los colores vivos, caminar desnuda y descalza, pasar tiempo sola con mi compañìa y perderme en algun libro,  no hablo de nadie, ni me gusta que me hablen de nadie, se me acelera el corazón con cosas tan simples...
Yo puedo fingir que esty en la cima de mi amor propio, mostrarle al mundo una "yo" que no existe, puedo hablar en letras vacias explicando lo que ni yo todavia comprendí, puedo levantar la bandera del amor propio para contagiar a otras mujeres que me ven mientras por dentro estoy destrozada
y elijo no hacerlo
yo puedo enmascarar este aprendizaje tan profundo diciendo "muestro mi cuerpo porque me amo" y eso no es suficiente
eso es una mentira
eso no es real

La realidad es caerse cientos de veces mientras en el corazón, una única visión nos mantiene caminando hacia adelante, el amor propio verdadero te lleva a perdonarte cada día por lo que no supiste manejar porque no tenías la sabiduría suficiente.
el amor propio de verdad DUELE HASTA LOS HUESOS, porque te enseña a ver dentro, te enseña que nadie a tu alrededor es responsable de lo que cargas en tus espaldas-
eso es amor.
basta de vender excusas baratas, que si muestro mi cuerpo porque me gusta y SE ME PUTAS ANTOJA lo hago, pero eso es solo un detalle, eso es mínimo, eso no es nada.

AMARSE es levantarse e irse muy lejos ante la primera y más minúscula falta de respeto.
es mirar al otro en el fondo de sus ojos y que entienda con simples palabras que NO sos su alfombra.
el amor propio es un trabajo que no termina nunca. nunca.
es una antorcha que se enciende dentro y que depende de uno que asi, encendida, continúe.
y si se apaga, me perdono, me levanto y sigo, no pasa nada, porque estoy viva, entonces tengo la oportunidad de reafirmar lo que soy.
No hace falta gritar a los cuatro vientos. No hace falta exagerar las cosas.

Mi ego no quiere morir, pero tiene que hacerse a un lado todos los días de mi vida hasta el final, porque mi religión es el amor propio, es el remedio que me sana.
Lo que me guía, lo que me mueve.

Y si me debilito, aprendo nuevas formas que me sirven para volverme mejor, que sirven a otros que me entienden cuando digo lo que digo.
Yo soy esto. Yo no escondo
Yo no finjo
No decoro las cosas
Me niego a hacerlo. No lo voy a hacer.
Por esto mismo, en el camino voy perdiendo amigos que ya no vibran a la par y al final me voy quedando sola, sin que me importe. sola.
porque no tengo de qué hablar con ellos, o simplemente porque prefiero estar acá, descalza, comiendo lo que cociné para mí, solita sola, mirar mujer bonita y llorar emocionada, viendo una pareja bailar tango.
A veces conecto con almas afines y qué belleza, qué increíble la paz que mi interior siente, vuelvo a respirar con calma-
Alguna vez tu infierno, el tuyo interno olvidado, la sombra que escondes, encuentra el espejo mas retorcido donde se refleja cada miedo, te quedas demostrandote todo lo  que se puede aguantar. y queres frenarlo pero se hace difìcil... qué será lo que me llevó a esto? No importa, a bailar! A sanar. Bendigo esos maestros pero les cierro la puerta.

creo que fue necesario ponerme diferentes armaduras. Hasta acá.

Quisiera leer lo que esperaba del año anterior, espero haberme ablandado, haberme amoldado más a mí y menos a una voz vacia, a una mirada sin misterio;
 Puedo marcar mi camino de la manera que sé y van a ir apareciendo sabré cuantos mas, eso no lo sé predecir...
Pero estoy firme en cada músculo, en cada fibra, no me moví del plan porque vengo trayendo esto hace más tiempo del que sé contar y pude ver más allá de la situación, a pesar de la energía oscura que empujaba en contra, solo por amor a lo que siento como si el corazón se quisiera salir.
Por amor a mi.


Somos suficiente cuando somos íntegros en nuestros sentimientos, somos íntegros cuando sostenemos con nuestros actos lo que soltamos en nuestras palabras primero, eso nos hace ser suficiente,
escuchen a esta demente.

una flor solitaria.

la amiga de cualquiera, que siempre fue de pocas amigas... porque siempre se sentía extaña a la hora de conectar. No más-
esto lo aprendí y lo sigo aprendiendo, por eso no puedo darme el lujo de no escribirlo y que se pierda, quede en el olvido, porque nada, ni un detalle de lo que me llevó a ser quien soy queda lejos de mi proceso de metamorfosis.

lunes, 19 de marzo de 2018


En la máquina del tiempo, volviendo exactamente un año atrás, ahí estaba yo, esperando el colectivo con el corazón totalmente destrozado y una cara que no podía disimular siquiera  un segundo, la cantidad de horas que llevaba llorando desconsoladamente, sin parar.

Había soñado toda mi vida encontrar un amor como el que sentía en ese entonces, mi vida dio un giro total cuando llegó y todo fue hermoso, hasta que este día tuvo que golpearme,  nadie sabe lo fuerte que me golpeó, es algo que jamás voy a poder olvidar.
Me sentía perdida, totalmente desilusionada, estafada por el mismo Universo que me había regalado algo tan hermoso, para después arrancarlo de mis brazos en un segundo, sin previo aviso.

El paso de los días no hacía más que hundirme en una tristeza que parecía no tener fin, todos prometían una y otra vez que el dolor iba a pasar pero yo no creía esas palabras, porque todo era gris en mi cabeza y también, por supuesto, a mi alrededor.
 Fueron muchos los días en que despertaba y sin siquiera abrir los ojos lloraba, así empezaba mi rutina y seguramente el día terminaba igual.

Yo sé lo que es esperar una respuesta que no llega, haber dado tanto y sentir que no fue reciproco, no de la manera en que supe dar, creo que una mujer cuando realmente ama de la forma más real y pura se entrega tan completa que no se detiene a pensar ni un momento en las consecuencias, porque es inevitable, porque no entra en la mente la sola idea de dejar ir algo tan inmenso, soltarle la mano a una persona con la que deseabas desde lo más profundo del corazón formar un camino donde solo exista la compañía y el respeto, porque ese era mi sueño, un sueño que solo deseaba vivir con la admiración y felicidad que siempre sentí merecer.
Pero la vida tenía otros planes diferentes a los que yo me estaba armando, sabía que tenía que ser fuerte pero solo perdía peso, cada vez que me miraba en el espejo veía los restos de la mujer inmensamente enamorada que había sido y lloré de dolor hasta el cansancio, por meses y meses no me di la chance de salir de mi propia burbuja mental, de conocer a alguien más, porque los planes para distraerme no funcionaban jamás, por mucho que intentaba esforzarme, mi cuerpo estaba ahí, mi mente quien sabe, yo no sabía tampoco, no sabía como equilibrarme.

Noches enteras de cuestionarme como salir de esa sensación de soledad y ese dolor en el pecho que no me dejaba respirar, en el techo de la casa de mis papás, siempre escribiendo, sentada mirando al cielo, pidiendo que pare por favor, que alguien pare el dolor que me estaba ahogando cada día un poco más.

Llamadas que no eran devueltas, mensajes ignorados, discusiones sin ningún sentido sobre algo que ya había terminado, estancada en mi propio laberinto mental.
Dios sabe de toda la energía que invertí para salir de ese estado, no me rendí ni desanimada.

De pronto ya podía caminar de madrugada por la calle sin sentirme desprotegida, sin llorar desconsolada, así también empecé a ver en el espejo una mirada diferente, una sonrisa diferente pero no era suficiente, porque una relación terminada es un espejo inmenso que nos devuelve el foco a nuestra propia vida y la negación inconciente de esto es lo que provoca no poder desapegarnos de lo que creemos que debería haber sido y NO ES;

9 meses pasaron para que yo vuelva a nacer, exactamente 9 meses para que vuelva a emprender un viaje al lugar donde sabía y sé, siempre me devuelve la alegría y la vitalidad que pierdo cuando descuido mi energía, que es tan linda y tan grande.

Volví a armar mi valija con los miedos de siempre, con las dudas de siempre pero con una certeza inmensa en el alma: Voy a sanar hasta la herida más insignificante por la que haya tenido que pasar no solo en esta historia, sino en mis 25 años, voy a grabarme a fuego la lección que me tocó, para jamás olvidarme que el foco de mi vida tengo que ser yo misma siempre, mis sueños y anhelos más profundos, que tanto me costaron aceptar y  sobre todo voy a brillar donde sea que pise, siempre con mi autenticidad de escudo y dejando en claro lo mucho que creo en mí.

Brasil me ama tanto como yo amo estar en su tierra. Yo siento como fluye todo al momento en que me adapto, es algo inexplicable.
Esta vez me propuse que el tiempo fuera indefinido, aunque no voy a estar más de un año, porque mi meta es otra, quiero aprovechar cada momento de todo lo bueno que la vida me da y no volver a sufrir de esa manera nunca más; Eso es todo lo que sé, no me lo permitiría por nada, ni en mi próxima vida, sé que estoy preparada para todo lo que ya está llegando, preparada para recibirlo con mis brazos abiertos y la sonrisa que se apagó por un tiempo en su momento pero que ahora está intacta, en mi cara las 24 horas para no irse por nada, por nadie.

Al principio todo me recordaba lo que vine a olvidar, lo que vine a soltar, ya con el paso de los días logré adaptarme, logré realmente elegir con el corazón el lugar donde decidí vivir y puedo decir que ese amor que yo sentí por alguien más no murió, no quedó en el aire, no desapareció, ese amor existe en mí, para mí, ese amor me ayudó a revivir, a que hoy pueda mirarme en el espejo y ya no vea ni tristeza, ni dolor, sino A MI, entera, completa, bien firme y fuerte en mis convicciones. 

Me gané realmente el tatuaje que tengo en mi hombro izquierdo,
Soy resiliente hasta la médula, saqué del dolor más profundo la lección más importante de mi vida y sé que voy a mantenerla por el resto de mis días, HOY sí puedo decir con total firmeza que me amo profundamente, mucho más de lo que haya podido imaginar y que estoy totalmente segura de que la vida tiene para ofrecerme miles de aventuras nuevas, miles de experiencias diferentes y tantas otras personas que van a aparecer a lo largo de este camino para darme el amor que yo misma me doy, el respeto inmenso que tengo por todo lo que me hace la mujer que soy y la admiración que yo siento cuando miro para atrás.

En este momento solo disfruto la belleza de mi presente, de no extrañar a nadie, de no sentir ningún tipo de dolor o rencor, disfruto de la mágia que genera ser agradecida con absolutamente todo lo que llega y se va, disfruto de mí misma, de verme cada día más hermosa porque sé que es realmente desde adentro hacia afuera, florezco cada día más y todo parece tener sentido.

Puedo mirar atrás y sentir una felicidad inmensa por mí misma, un orgullo que no puedo explicar en palabras, que la vida me haya dado tanta salud para poder disfrutar las cosas que veo desde que despierto hasta que vuelvo a dormir, estos paisajes que son un paraíso y que hoy son mi casa, mi lugar.
Puedo mirar atrás y el pecho me explota de alegría porque recuerdo que no podía levantarme de la cama de tanta tristeza y hoy no me alcanza el día para todas las cosas que quiero hacer, porque necesito un día de 28 horas para todas las actividades y lugares a los que quiero ir, para toda la gente hermosa con la que estoy compartiendo lo lindo que es sanar, lo difícil que es curarse a sí mismo y no puedo no decir lo valiente que me siento, lo mucho que respeto a cada persona que pasa por este proceso de levantarse solito y moverse donde la vida lo lleve para no cargarse con amarguras, para avanzar sin parar.

Vine acá a crecer física, espiritual, mental y emocionalmente.
Vine acá porque no podía ir a ningún otro lugar que no sea el que planeé la primera vez que viajé, cosa que al final… no hice, por amor, porque me enamoré con todas las fuerzas y decidí volver a Buenos Aires. Dónde más iba a ir si no era acá? para encontrarme con lo que nunca tenía que haber perdido, el amor por mi propia vida.

Vivo por un propósito mucho mayor que cualquier deseo de mi propio ego, vivo por una meta que todavía no sé como voy a llevar a cabo, vivo por los sueños que la vida suspiró en mi oído una y otra vez, hasta que se cansó de que no quiera escuchar y los gritó con todas las fuerzas para que abra los ojos, me sacudió y me enseñó al 100 por 100 lo que tanto predico, el amor propio y sus bendiciones, lo fuerte que es para esta tierra la energía que emana una mujer que se valora por encima de todo, porque lo contagia donde quiera que va, porque esas palabras que tanto dije, que tanto escribí sobre ponerse primero, se me hicieron carne y son hoy lo que respiro, lo que transmito, lo que se ve cuando me ven.

No me cansaría nunca de agradecer la oportunidad de estar acá, de estar lo suficientemente presente para ser mi propia testigo, testigo de como todo se va amoldando a medida que uno entiende que es hora de crecer, a medida que se despoja uno de sus propias limitaciones, de sus miedos, me siento desnuda de todo eso, siento que al fin brilla de nuevo esa luz en mí, que floto cuando camino, que sonrío y sin motivo pero que a su vez los tengo todos, todos los motivos y más;

Creo que la vida fue tan buena conmigo que no puedo guardar ningún tipo de rencor con nadie, es que hay gente que se va de este mundo sin saber lo que es amar tan profundamente como amé, hay gente que se va de este mundo sin poder apreciar la lección tan inmensa de amarse desde lo más profundo como lo estoy haciendo.

Sé que a partir de ahora todo lo que atraiga va a nacer desde ese sentimiento que tengo por mí misma y me llena de felicidad, porque al fin estoy lista, al fin estoy donde quería estar, donde tantas noches escribí rogando por favor, que llegue este momento donde pueda verme así, donde los colores estén vivos a mis ojos, donde pueda disfrutar de mi propia compañía sabiendo que no me falta nada, porque mente/cuerpo están viviendo en el momento presente, estoy completa y no voy a soltarme la mano, porque lo mejor está viniendo, lo mejor ya está acá.
Y ahora solo me queda disfrutar, como lo estoy haciendo.
De los nuevos amores, amistades y anécdotas que la vida guardó para mí acá mismo.

Y despido la temporada de Piscis que fue para soltar por completo, feliz porque lo hice, ahora puedo recibir la temporada de Aries con esto que escribo, la temporada de los verdaderos inicios, la primavera astral, libre para florecer y florecer sin parar.

Que la mágia siga todo el año!

lunes, 10 de abril de 2017

Back on track

Sentada y dispuesta a escribir una vez más, vuelvo a este espacio mío que tanto extraño cuando la inspiración es débil o demasiado personal como para expresar ante los demás.
Hace casi 10 años que este blog se volvió una herramienta más en mi camino de amor propio y autoconocimiento, 10 años en los que crecí en todo aspecto posible pero siempre desde la energía que vive en mí de fábrica, amando, a mi manera, mucho o poco, amando.

Al principio, a este espacio, lo usé para expresar el amor que creía sentir hacia otra persona...
Era mucho más ingenua y soñadora que hoy, me emocionaba solo la idea de vivir algo tan profundo como lo que mi corazón decía, algo que vivía en mí... en ese momento yo creía que era para alguien más, tardé años en admitir que estaba confundida, siendo tan chica realmente no sabes qué es el amor.
Pasaba horas leyendo otros blogs donde podía sentirme inspirada con esas sensaciones que estaba conociendo en la adolescencia.
Después vinieron los desamores, uno tras otro y sin parar. Claro que algo andaba mal desde el principio.
Entonces me enojaba y creía que era tonta, ¿por qué nadie tomaba de mí, todo eso que tenía para dar? Por qué nadie veía lo que yo cuando pensaba en el amor, hacia vivir, hacia todo ese mundo hermoso que ignoramos cuando crecemos? ¿Por qué ellos se negaban a aceptar lo que yo creía que podía dar?
Los años fueron pasando y entendí lo malo que es estar enamorada del amor, olvidé que siempre la vida tiene algo mejor, olvidé que realmente existe "el indicado" mientras me perdía a mí misma en el deseo de ser amada por hombres que no tenían idea de lo que buscaban de la vida, de ellos mismos, de mí como mujer.

Siempre es mucho más fácil señalar al otro sus faltas y errores que hacerle frente al espejo sin miedo, aceptando la parte que nos toca, ser lo suficientemente fuerte como para secarse las lágrimas, pararte en tus dos pies y admitir que algo estaba mal dentro tuyo, algo que no supieron enseñarte correctamente, una lección que no aprendías porque preferías llorar por tus emociones rotas en lugar de enmendar tu propio corazón entendiendo que hay mucho por sanar.

Bendigo el día que rompí con ese karma.
El día que dije ¡A la mierda con esto! No quiero ni uno más.
El día que decidí relacionarme de manera consciente con el mundo que me rodea, el día que la tapa de mi cabeza voló quien sabe donde porque desde entonces soy otra persona.


Entendí que no soy la que consuela al hombre que no sabe qué quiere, no soy la psicóloga del que no sabe donde va, no soy la bolsa de boxeo del que no se acepta a sí mismo y necesita al lado a quien denigrar.
No soy mártir de nadie, no soy la salida de sus adicciones, no soy el consuelo de sus fines de semana, no soy la compañía cuando le sobra tiempo, no soy la que está dispuesta a la madrugada.
No soy la mujer maceta al lado de un tipo que no me valora, decorando su mierda con mi belleza y juventud.
No soy la segunda... a veces tercera, a veces quien sabe.
Está bien decir "no" Conmigo, no! A esto yo no vuelvo más.
Una relación que te causa más dolor que sonrisas, donde hay más llanto que caricias, no es más que el poco amor que sentís por vos misma.

Bendito sea mi primer viaje a Brasil, bendita cada persona que me crucé ahí, cada error, cada lágrima y cada humano que en ese viaje me enseñó lo que realmente soy y lo que jamás fui.
Bendita mi conciencia, y el Universo que me permita prepararme para llevar un mensaje tan importante como este.

Así desperdicias tu tiempo esperando que cambie quien no quiere cambiar, cuando la única que debería cambiar es tu manera de pensar con respecto a quien sos, lo que haces, lo que das.
La vida empieza cuando te liberas del patrón que limitó tu vida, cuando entendés que sos libre de ir, de venir, de sentir, de reir porque viniste a este mundo a ser feliz; Sigo siendo la adolescente que soñaba con su amor verdadero... pero ahora no lo sueño, lo conozco y eso me hace libre de ir, venir, sentir y reir, entonces puedo tambien decir que necesité todas esas lagrimas para llegar a amarme, para reconocer que dentro mio brilla muy fuerte la mujer que estoy destinada a ser.
Y que ese amor verdadero soy yo.

Porque detrás de mi psicóloga interna siempre dispuesta a ayudar y sanar al hombre incorrecto, estaba yo misma, sola, intentando ser fuerte, manteniendome segura para no derrumbarme.
Y hoy estoy yo, ya no intentando nada, siendo fuerte, siendo YO misma, para bien o para mal.
Siempre dije que no podía llegar a los 25 años sin sentirme mujer y creo que una vez más me sorprendo de mí misma. Me encuentro sonriendo sola cuando leo un libro, puedo salir en mis propias citas, me miro en el espejo y me veo linda cuando despierto, reconozco mis talentos sin vergüenza y les doy su lugar... pero sé que todo esto recién empieza, el camino del autoconocimiento es eterno, muy, demasiado largo pero lo voy caminando con una sonrisa inmensa porque yo tambien soy eterna, nada me apura.
Acá encuentro mujeres que fueron lastimadas como yo, que se perdieron por amor, como yo y que no saben como salir de ese espiral de dolor que parece no tener fin. Pero lo tiene.
Así que puedo abrazar el propósito de mi vida y darle la bienvenida a todo lo que preparó para mi felicidad eterna, mientras yo hacía otros planes, de esos inmediatos, cuando queres todo YA.
La vida es una sola y después de los errores llega el verdadero aprendizaje, entonces el crecimiento ya no es doloroso, se vuelve divertido soltar lo que en otro momento te hubiera dejado paralizada a mitad de camino, perdida en tus dudas y en la incertidumbre del futuro.
Qué importa el futuro si tenes tu presente? Si te tenes a vos misma que importa lo demás?
No hay sentido en llorar por lo que no está, más bien hay que hacer lugar para lo que va a venir, porque los ojos solo pueden ver al nivel que tu propia mente esté preparada y yo creo en la magia, eso espero de la vida y del amor, porque lo viví cuando aprendí a amarme y sé que existe.
Puede que te dejes quebrar el corazón en dos unas cuantas veces hasta llegar acá pero te aseguro que no vas a arrepentirte ni un segundo de dejar ir, porque la vida no está estancada, vive en cambio constante, mereces fluir con esa vida, mereces alcanzar tus sueños más que nada.
En un año vas a mirar atrás orgullosa de lo que dejaste ir, eso que te parecía imposible y soltaste, entonces al lado tuyo vas a ver tus recompensas, no hay dolor, ni un poco de dolor.
Cada relación te enseña esa parte que no está bien dentro tuyo, se necesita gran valor para reconocerlo, no te quedes con lo que queres ahora, espera eso que mereces mientras trabajas en vos misma.

Esto es una pequeñisima parte de mi aprendizaje, esto es lo que lucho todos los días por hacerle entender a las mujeres que amo, esto es lo que me ayuda cada día a valorarme y ponerme por encima de cualquier situación que se me presente.
Tal vez te digan egoísta pero ya sufriste demasiado como para que sus palabras te hieran, yo le digo "amor propio" tambien, porque estuve ahí mismo, en esa tristeza y me saqué como pude.
No sos egoísta poniendote primero, sos inteligente porque todas las relaciones nacen de tu amor propio, de como te sientas en tu piel más que nada, de lo que te permitís recibir porque es lo que vos misma sabes darte.
Me gustaría sacar de ese agujero a cuanta mujer conozca pero no tengo superpoderes.
Solo tengo estas palabras. Pueden sonar un poco chocantes al principio pero ... hay algo mejor que decir la verdad?
Amate tan profundamente que nada te pueda herir, amate hasta llenar ese vacío que pretendías llenar con algo externo, porque el amor no te lo va a dar nadie si no lo encontras dentro tuyo primero, porque el amor es lo único que conocemos al nacer en este cuerpo y lo único que nos llevamos, cuando al fin lo dejamos en la tierra.
Amate porque solo cuando rebalses de ese amor tan lindo que te das, vas a poder compartirlo con tu verdadero compañero, si asi es lo que tus sueños dicen.

Bendito sea el verano del 2015.
Y bendita sea mi otra mitad.